top of page

¿Porqué una dieta flexible funciona?



Yo no sé como pase años categorizando alimentos como buenos y malos, me desesperaba porque estaba comiendo sano y no veía cambios. Yo también pase por esa etapa que iba al gimnasio, comía lo que la industria fitness decía que era sano y sin embargo no llegaba donde quería. ¡Cuando comencé una dieta flexible fue que me di cuenta donde estaba mi error, la dieta flexible funciona porque es simplemente matemática (calorías consumidas vs calorías gastadas) Así de fácil!


​Lo más complicado es comenzar (como todo lo nuevo) tratar de establecer la cantidad de macronutrientes que debes consumir. ¡No hay número exacto! Depende del método que utilices vas a obtener diferentes resultados, claro todos estarán por el mismo rango pero para comenzar no te compliques. La aplicación que yo les recomiendo siempre para comenzar es: MyFitnessPal. Con una dieta flexible puedes disfrutar de alimentos que te gustan, aprendes sobre ellos. Cuales son más altos en grasa, carbohidratos, proteína, etc. El inicio parece confuso y pesar la comida puede ser fastidioso, pero te has puesto a pensar ¿cuál es la diferencia a utilizar tazas de medida? Que es lo más común en los “panes alimenticios”, de las dos formas estar controlando la cantidad con una balanza simplemente hace el proceso más exacto.


Yo lo veo así: al final del día si te decidiste a comenzar una vida más sana y estar consciente de lo que comes va a requerir de mucho trabajo y esfuerzo sin importar el método que utilices. Ya sea comer pollo y vegetales todos los días o llevar una dieta flexible en la cual puedes incluir ciertos gustos debes en cuando. Ser un poco flexible no solo ayuda a no sentir que estas en “dieta” y extrañar ciertas comidas sino a darte cuenta que para tener un estilo de vida más sano solo tienes que aprender a controlarte en las cantidades que consumes.


Por ejemplo: Yo cuando estaba siguiendo dietas pensaba que comer una galleta, helado, pasta, panquecas, etc. iba arruinar todo el proceso, esto lo único que hacía es que mi cuerpo y mente piensen solo en galletas y anhelaba el día de mi “cheat meal” para poder comerme una. Por ende, cuando terminaba la dichosa dieta lo único que quería era comer todo lo que me había restringido durante la dieta. Comenzaba a comer de todo para después comenzar otra dieta….. Y ese es un ciclo vicioso y lo que nos desanima a la todos.


Con la dieta flexible aprendí que una galleta tiene más o menos 30gr de carbohidratos, 12 de grasa y 9 de proteína (depende de que galleta) y fácilmente la puedo incorporar en mi comida si me da ganas. Me como la galleta sabiendo que está incluido en mis macros y no me siento culpable, por ende, mi cuerpo no siente que está en una dieta y es más fácil seguir con un estilo de vida flexible que con una dieta que tiene fecha de vencimiento.


Todo en moderación claro, es importante monitorear la cantidad de fibra consumida ya que esto nos ayuda a regular el consumo de alimentos fibrosos y naturales. Si bien es cierto que con una dieta flexible le pierdes miedo a ciertos gustitos tampoco hay que abusar porque tu cuerpo necesita de los vegetales, frutas y alimentos fibrosos. Mi recomendación es siempre asegurarse de consumir por lo menos 15 gramos de fibra por cada 1000 calorías consumidas.


Al final del día hay muchos métodos que funcionan, pero mi recomendación es no comiences una “Dieta” a menos que te veas haciéndola por el resto de tu vida.


Besos y abrazos de oso a la distancia


xoxo

Carol del Toro


315 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page